enero 31, 2011

CIUDAD PERDIDA DE FALAN - MINAS DE SANTA ANA


En la cordillera central de Colombia se localizan zonas en las que las posibilidades de la minería son bastante altas; no necesariamente en un sentido positivo. La megaminería ha puesto sus ojos en algunas sectores en los que su labor tendría un altísimo costo ambiental, relacionado con la deforestación de extensas zonas de bosque andino, la disminución o deterioro de numerosos cauces, y por consiguiente un alto costo social de subempleo, desplazamiento y pobreza. Esto sucede por ejemplo en Cajamarca, Tolima, donde la Anglogold Ashanti pretende explotar una vasta zona, relativamente cercana al Parque de los nevados y su zona de influencia.


Iglesia de Santa Ana, Falan

La minería en el Tolima, sin embargo no es una actividad nueva. Aunque las culturas Tolima y Quimbaya explotaban minas de oro para la confección de piezas de orfebrería para múltiples usos, durante la colonia, los españoles encontraron una zona de explotación de oro en el piedemonte de la cordillera central, cerca a los importantes poblados de Mariquita y Honda. En su lugar, conocido como Rosario de Lajas y luego Santa Ana, se construyó una compleja infraestructura de túneles, socavones, canales, y muros. Dicen los habitantes de la zona, que los túneles se comunicaban con la casa de la moneda, en Mariquita, donde en la actualidad es posible ver la entrada de uno de ellos; otros posiblemente se dirigían al puerto de Honda. En cercanías al yacimiento, ubicado a la ribera de la quebrada Morales, se erigió un poblado llamado Santa Ana.



Luego de la expulsión de los españoles, fueron los ingleses quienes continuaron la labor minera, y a finales del siglo XIX, las minas fueron abandonadas. Por su parte, Santa Ana, a comienzos del siglo XX cambió su nombre por el de Falan, en honor a uno de sus hijos eméritos, el poeta Diego Fallón. Y las minas fueron consumidas por la vegetación. "Comidas por el monte" como dirían los campesinos de la región, dando en las construcciones el aspecto de antiguas ciudades perdidas. Llegar a la Ciudad perdida de Falan es muy sencillo, a pesar de que su nombre sugiere lo contrario. Distante apenas 20 kilómetros de Mariquita, en el parque de Falan es fácil contactar algún guía, que además de orientar al visitante en el recorrido, puede dar cuenta de las historias y leyendas relacionadas con el lugar.

En la quebrada Morales, aún algunos pobladores van a barequear, buscando el oro en el aluvión del río

Falan es un colorido pueblo, más parecido a un pueblo cafetero que a sus vecinos del valle central del Tolima. Y a pesar de su pequeño tamaño, son variadas las posibilidades: visitar el mirador del cerro de San Juan, las cascadas de la quebrada Morales y probar además el famoso Chupado, plato típico de la región. La ciudad perdida, su principal atractivo turístico es un interesante paraje, donde la naturaleza finalmente sometió la obra del hombre y recuperó su espacio; algo que no debería serle arrebatado, como lamentablemente puede ocurrir en Cajamarca, y aún como ha ocurrido en otras regiones de Colombia.



Textos: Fundación Senderos y Memoria
Fotos: Santiago Rincón Leuro

7 comentarios:

  1. Disculpen cuando hacen un recorrido o una caminata por Falan (minas.) para inscribirnos.
    Tengo varios candidatos que estamos interesados.

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  2. pueden llamar a los siguientes numeros 3134546764 o 3132669513

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  3. Que bonito paseo vale la pena que le den mayor impulso turístico, queda uno asombrado de la belleza histórica y pasiajistica.

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  4. "Pueblo que no conoce su historia, está obligado a repetirla"
    https://ibagueysugentedeltolima.blogspot.com

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  5. Muy bonito e interesante... Vale la pena la rodadita

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