julio 12, 2010

CAMINO SUESCA - CHOCONTÁ


El altiplano Cundiboyacense es un escenario de colinas suaves, diferentes tonos de verde, cultivos y amplios caminos, muchos lastimosamente convertidos en carreteables, y terrenos a media distancia entre los páramos y los bosques húmedos, donde la agricultura y la ganadería han ganado un gran espacio sobre el entorno nativo. Esto sin embargo no resta el encanto de caminar por esta región. Chocontá y Suesca son dos municipios muy cercanos el uno del otro y el paisaje entre los dos es típico del altiplano. Cuando está nublado el ambiente es húmedo y frío y el viento azota con fuerza, pero cuando hace sol, el verde se hace más vivo y los caminos más firmes.



Aunque esta es una ruta corta, son numerosos los atractivos que ofrece; desde una increible vista sobre el farallón rocoso de Suesca y la cuenca del Río Bogotá a sus pies, hasta las frías laderas del Valle de los Halcones. Un continuo ascenso conduce a las veredas de Güita y Tausaquirá, desde donde se ven extensos potreros y cultivos de papa, pequeñas casas campesinas de tapia o bahareque y continuando la cuenca del Río Bogotá, el pueblo de Santa Rosita, corregimiento de Suesca a media distancia por la carrilera entre los dos municipios de la ruta. un corto descenso lleva luego a la vereda de Manacá, ya en terrenos de Chocontá en una zona en la que las colinas parecen interminables, y los ascensos y descensos son suaves pero prolongados.



En Suesca se ha dejado atrás la sabana de Bogotá hacia el norte y poco a poco se acerca el departamento de Boyacá por largos caminos veredales. Chocontá es un punto de cruce de diferentes caminos que llegan o se dirigen hacia el valle de Tenza, por Machetá, el valle de Ubaté, por Cucunubá, y el sur de Boyacá, por Villapinzón y Ventaquemada; sin embargo es reconocido principalmente por las gigantescas antenas instaladas por Telecom en la década del 70, con la que se le daba la bienvenida al país a las comunicaciones satelitales, y que hoy parecen un monumento olvidado a la rapidez del desarrollo tecnológico.


Santa Rosita, Suesca

Texto: Fundación Senderos y Memoria
Fotos: Santiago Rincón Leuro

No hay comentarios:

Publicar un comentario